Tratamiento
El tratamiento dependerá del tipo de cáncer de esófago que tenga, su estadio, dónde está y su salud en general. Es importante entender por qué se le ha sugerido un tipo de tratamiento en particular. El cáncer de esófago se pude tratar con cirugía, quimioterapia o radioterapia. Los tratamiento se pueden usar solos o en combinación.
El tratamiento se puede usar para curar el cáncer, o se puede administrar con el objetivo de controlar el cáncer y aliviar los síntomas, si no hay cura posible.
Al planificar el tratamiento se considera el esófago en tres secciones: superior, media e inferior.
DIETA ANTES DEL TRATAMIENTO
Muchas personas con cáncer de esófago tienen dificultades para comer y es posible perder peso. Mientras espera el tratamiento es importante comer lo mejor posible, utilizando suplementos alimenticios si es necesario. El aumento de la cantidad de calorías que tenga le ayudará a frenar la pérdida de peso. Esto puede ayudar también a lidiar mejor con el tratamiento.
Si tiene dificultad al tragar, puede que tenga que cambiar la consistencia de los alimentos. Realizar pequeñas comidas suaves y regulares es mejor que tres grandes al día. Si no es capaz de tragar nada, debe ponerse en contacto con el hospital.
TRATAMIENTO DE CÁNCER DE ESÓFAGO EN ESTADIO TEMPRANO
Si tiene cáncer de esófago en estadio temprano, que no se ha diseminado, se puede ofrecer cirugía para extirpar el cáncer. Y en algunas ocasiones se puede proceder a la resección mucosa endoscópica.
Si el cáncer ha comenzado a extenderse (estadio 2 o 3), se puede ofrecer quimioterapia, o quimiorradioterapia, seguido por una operación. En ocasiones se vuelve a dar quimioterapia después de la cirugía. Si se encuentra con mal estado general para la quimioterapia, se le puede dar radioterapia o cirugía.
Si el tumor es difícil de eliminar con una operación, es posible que primero tenga la quimiorradioterapia. Esto a veces hace la cirugía posible.
TRATAMIENTO DE CÁNCER DE ESÓFAGO EN ESTADIO AVANZADO
Si tiene cáncer de esófago en estadio avanzado, o no se encuentra bien como para algunos tratamientos, se puede administrar quimioterapia o radioterapia para ayudar a controlar el cáncer y sus síntomas.
Otros tratamientos pueden ayudar con la dificultad para tragar que pueda tener:
- Colocación de un stent (inserción de un tubo en el esófago para mantenerlo abierto)
- Dilatación (ensanchamiento de la región estrecha del esófago por el tumor)
- Tratamiento con láser y terapia fotodinámica (PDT)
¿CÓMO SE PLANIFICA EL TRATAMIENTO?
Su tratamiento será planificado por un grupo de especialistas que se reunirán para discutir y ponerse de acuerdo sobre el plan de tratamiento que sea mejor para usted.
Este equipo multidisciplinario incluirá:
- Un cirujano (que se especialice en su tipo de cáncer)
- Un oncólogo médico
- Un oncólogo radioterápico
- Gastroenterólogos
- Radiólogos que ayudan a analizar radiografías y tomografías.
- Patólogos que asesoran sobre el tipo y la extensión del cáncer.
También puede incluir otros profesionales de la salud, tales como un médico de atención paliativa (que se especializa en los síntomas control), nutricionista, fisioterapeuta, terapeuta ocupacional, psicólogo.
LOS BENEFICIOS Y DESVENTAJAS DE TRATAMIENTO
Puede tener miedo del tratamiento para el cáncer por los efectos secundarios que pueda padecer. Aunque los tratamientos para el cáncer de esófago pueden producir efectos adversos, se le dará ayuda para controlarlos.
El tratamiento se puede dar por diferentes razones y los posibles beneficios varían en función de la persona y de la situación. Su médico le puede decir si el objetivo principal del tratamiento es curar el cáncer, controlarlo durante un tiempo o reducir los síntomas y mejorar la calidad de vida. También puede decirle los posibles efectos secundarios del tratamiento y si éstos son temporales o permanentes.